La falta de electricidad, última excusa para no abrir el Hospital del Guadalhorce
Fuentes sanitarias dan por hecho que no se
abrirá este año -como prometió Salud- porque queda su recepción,
equipamiento y dotación de personal; incluso dudan de que pueda entrar
en funcionamiento en plena crisis
La obra del Hospital del Guadalhorce se inició en 2008, cuando en
realidad debía estar acabada. La Consejería de Salud aplazó su apertura y
dio un nuevo plazo de apertura: 2012. Lo ha construido a pesar de la
crisis. Parecía que de todas las infraestructuras sanitarias prometidas
en la provincia -chare de Mijas, de Estepona, CARE de Torremolinos y megahospital-,
iba a ser el único proyecto capaz de ponerse en marcha porque mientras
su edificio ya está acabado, todos los demás de momento no son más que
puro papel.
Pero ahora amenaza con convertirse en un edificio fantasma,
terminado y sin uso, debido a los apremios económicos que atraviesan
todas las administraciones. La Delegación de Salud esgrime que tanto
esta Consejería como la Diputación de Málaga han cumplido su compromiso y
han acabado el edificio hospital. Pero la Administración sanitaria
argumenta que no puede recepcionar el inmueble porque está pendiente la
acometida eléctrica, que ya es responsabilidad del Ayuntamiento de
Cártama. Y el Consistorio, pese a los reiterados e insistentes esfuerzos
de Málaga Hoy por conocer la situación de esa parte del proyecto, no contesta.
El portavoz de la Plataforma pro Hospital del Guadalhorce,
Miguel Esteban, aseguró que el problema es que el Consistorio no tiene
los dos millones de euros que son necesarios para ampliar la subestación
de Villafranco del Guadalhorce y tirar la línea hasta el futuro centro
sanitario. Y según Esteban, el Consistorio ya se lo ha comunicado a la
Junta. "La obra está acabada, pero el hospital sigue empantanado. La
constructora quiere entregarlo, pero el Ayuntamiento no tiene dinero
para la acometida y mientras tanto el Hospital Costa del Sol (del que
depende el proyecto) no lo recepciona; y toda esta situación la conoce
la Junta", resume Esteban.
El responsable de la Plataforma añade además que el
mantenimiento, la limpieza y la vigilancia de las instalaciones cuestan
más de 4.000 euros al mes "que tendrá que pagar la Junta". Fuentes
sanitarias dan por hecho que el Hospital del Guadalhorce no abrirá este
año como estaba prometido porque aún queda su recepción, el equipamiento
tecnológico y la dotación de personal. Para 2012 estaba hecha la
previsión económica para su equipamiento. Las fuentes consultadas
apuntan que la Consejería de Salud -que está aplicando recortes en los
centros ya abiertos- utiliza como "excusa" al Ayuntamiento de Cártama
porque tampoco tiene recursos para mantener abierto un hospital más en
la provincia. "Una cosa es recortar jornada a los interinos o no renovar
contratos y otra es abrir un hospital que luego tuviera que cerrar. Si
se abre, tiene que tener garantizada su continuidad", comentan.
La inversión en el hospital, incluido el equipamiento, es de 27
millones de euros, un presupuesto que el centro hospitalario consumiría
en menos de dos años de funcionamiento en personal, mantenimiento,
reactivos, fármacos, prótesis y material fungible. Así que el problema
no es solo construirlo, equiparlo y abrirlo, sino mantenerlo luego en
funcionamiento.
Una portavoz de la Delegación de Salud indicó que el compromiso
de la Administración sanitaria es "terminar lo que está en obras". Y
acotó: "Abrir se abrirá. Se está a la espera de que el Ayuntamiento haga
su trabajo".
También quedan pendientes la urbanización del entorno y los
accesos, otro aspecto sin que el edificio no puede recepcionarse. Según
explicó Esteban, estos trabajos debe acometerlos el propietario que
cedió el suelo para el hospital. A cambio, tendrá derecho a explotar la
parcela aneja, siempre para uso sanitario. La licencia para la
urbanización y los accesos ya está solicitada. El edificio está
completo. Aunque de momento solo dispone de luz de obra, tiene la
instalación eléctrica y de fontanería acabadas. De ahí que sea necesaria
su vigilancia, porque de lo contrario podría ser objeto de robos.
El Hospital del Guadalhorce se anunció en 2005 y tenía un plazo
de tres años. Debía haber acabado en 2008. Pero no fue hasta finales de
ese año cuando se puso la primera piedra. Se demoró porque hubo un par
de convocatorias que fueron declaradas desiertas. Finalmente, cuando
entró en el proyecto el Hospital Costa del Sol fue cuando se desbloqueó y
pudo adjudicarse a Ferrovial. Está diseñado para 48 habitaciones
susceptibles de uso doble. Es la obra más importante desde que en 2001
abriera el hospital de Antequera y, en 2007, el de Benalmádena. Debe
aliviar al Clínico, el hospital con menos camas por habitante de la
provincia.