Terapia pionera en el SAS que implica a la familia para tratar la enfermedad mental.
Fuente.: Diario Málaga Hoy.
Se aplica por equipos de Marbella, Vélez, Cártama Estación, Antequera y
el Clínico y reúne a familiares, pacientes y profesionales.
Hay un tipo de tratamiento que gana terreno en la sanidad pública a la
hora abordar las enfermedades mentales. Se llama terapia multifamiliar y
se aplica desde hace cinco años en distintos dispositivos de
Psiquiatría de la provincia. Consiste en reuniones grupales en la que
participan pacientes, familiares y profesionales en igualdad de
condiciones.
A diferencia de otras terapias que agrupan a las familias por un lado y a los enfermos por otro e incluso los reúne en diferentes encuentros por patologías, la multifamiliar los trata a todos juntos. "Es como reproducir una minisociedad", explica Jesús Salomón, psiquiatra del Hospital Clínico.
Además, se incluye a la familia de forma activa en el proceso terapéutico del paciente. "Al principio a los familiares les cocha, porque tienen que hablar delante de su hijo de la enfermedad. Pero a la familia le sirve para entender y respetar mejor al paciente", explica Salomón. Los grupos se reúnen una vez a la semana durante poco más de dos horas. Según el psiquiatra, se trata de crear un espacio de seguridad afectiva, abierto y flexible.
Para Salomón, la terapia multifamiliar ofrece a los profesionales la posibilidad de ver con más frecuencia a los enfermos, lo que supone una mejora de la calidad asistencial y a la vez sirve de dispositivo de "contención, apoyo y acompañamiento" para las familias y los pacientes.
El tratamiento se utiliza en el Clínico, así como en los equipos de Salud Mental de Cártama Estación, Marbella, Antequera y en el Hospital de Día de Vélez. Los resultados, según Salomón, son evidentes. En comparación con otros pacientes que no están incluidos en esta terapia, los enfermos ingresan menos, necesitan menos medicación y acuden con menor frecuencia a Urgencias.
El profesional aclara que no funciona como un grupo de auto-ayuda, sino que el enfoque es terapéutico. En el grupo -como iguales-, participan pacientes, familiares, psiquiatras, trabajadores sociales y enfermeros.
Salomón destaca que debido a que todos los agentes de salud implicados en el tratamiento participan en la terapia, los enfermos reciben una atención integral. "La terapia les sirve para mejorar sus habilidades sociales, su mundo relacional, su forma de vincularse con los demás", añade. Además, en tanto ayuda a reducir la medicación, los pacientes están en mejor situación para intentar acceder al mercado laboral.
Según explicó el psiquiatra del Clínico, la terapia multifamiliar -que es una herramienta más junto a los fármacos y el tratamiento individualizado por parte de los profesionales- intenta "normalizar" la enfermedad mental. Aunque en el mismo grupo se puede reunir a pacientes con depresión, adicciones, psicosis o esquizofrenia, el fondo del abordaje es que todos tienen un elemento común: el sufrimiento humano.
A diferencia de otras terapias que agrupan a las familias por un lado y a los enfermos por otro e incluso los reúne en diferentes encuentros por patologías, la multifamiliar los trata a todos juntos. "Es como reproducir una minisociedad", explica Jesús Salomón, psiquiatra del Hospital Clínico.
Además, se incluye a la familia de forma activa en el proceso terapéutico del paciente. "Al principio a los familiares les cocha, porque tienen que hablar delante de su hijo de la enfermedad. Pero a la familia le sirve para entender y respetar mejor al paciente", explica Salomón. Los grupos se reúnen una vez a la semana durante poco más de dos horas. Según el psiquiatra, se trata de crear un espacio de seguridad afectiva, abierto y flexible.
Para Salomón, la terapia multifamiliar ofrece a los profesionales la posibilidad de ver con más frecuencia a los enfermos, lo que supone una mejora de la calidad asistencial y a la vez sirve de dispositivo de "contención, apoyo y acompañamiento" para las familias y los pacientes.
El tratamiento se utiliza en el Clínico, así como en los equipos de Salud Mental de Cártama Estación, Marbella, Antequera y en el Hospital de Día de Vélez. Los resultados, según Salomón, son evidentes. En comparación con otros pacientes que no están incluidos en esta terapia, los enfermos ingresan menos, necesitan menos medicación y acuden con menor frecuencia a Urgencias.
El profesional aclara que no funciona como un grupo de auto-ayuda, sino que el enfoque es terapéutico. En el grupo -como iguales-, participan pacientes, familiares, psiquiatras, trabajadores sociales y enfermeros.
Salomón destaca que debido a que todos los agentes de salud implicados en el tratamiento participan en la terapia, los enfermos reciben una atención integral. "La terapia les sirve para mejorar sus habilidades sociales, su mundo relacional, su forma de vincularse con los demás", añade. Además, en tanto ayuda a reducir la medicación, los pacientes están en mejor situación para intentar acceder al mercado laboral.
Según explicó el psiquiatra del Clínico, la terapia multifamiliar -que es una herramienta más junto a los fármacos y el tratamiento individualizado por parte de los profesionales- intenta "normalizar" la enfermedad mental. Aunque en el mismo grupo se puede reunir a pacientes con depresión, adicciones, psicosis o esquizofrenia, el fondo del abordaje es que todos tienen un elemento común: el sufrimiento humano.