La Santísima Virgen de los Remedios Coronada, Patrona de Cártama, volvió a recorrer ayer, 23 de abril, las calles de su pueblo.
Y lo hizo, como marcan los cánones de la
tradición, rodeada de la expectación y el multitudinario fervor y
cariño de miles de devotos. Muchos de ellos, llegados en peregrinación
desde numerosos puntos de la provincia, no quisieron faltar a su cita
anual con una de las devociones más populares y arraigadas de la
diócesis de Málaga.
La procesión partió de la Parroquia de San Pedro Apóstol pasadas las ocho de la tarde. Tras la Cruz Guía y el Guión figuraba la Banda de Cornetas y Tambores "Nuestra Señora del Carmen" de Málaga, que encabezaba el cortejo. A ella le seguían, cientos de devotos alumbrando con velas, encuadrados en varios tramos separados por tres estandartes con la imagen de la Virgen de los Remedios y a los que acompañaba la Banda "Sinfónica Trinidad".
La procesión partió de la Parroquia de San Pedro Apóstol pasadas las ocho de la tarde. Tras la Cruz Guía y el Guión figuraba la Banda de Cornetas y Tambores "Nuestra Señora del Carmen" de Málaga, que encabezaba el cortejo. A ella le seguían, cientos de devotos alumbrando con velas, encuadrados en varios tramos separados por tres estandartes con la imagen de la Virgen de los Remedios y a los que acompañaba la Banda "Sinfónica Trinidad".
Una sección de mantillas precedía a la Cruz Parroquial, tras la que la
Virgen de los Remedios avanzaba, cadenciosamente, a los sones de la
Banda de Música de la Cofradía de Zamarrilla. Ataviada con un manto
celeste y sobre un trono profusamente adornado con exuberante y colorido
exorno floral, la imagen recorrió las calles de Cártama, que volvieron a
engalanarse a su paso con banderas de España, reposteros celestes con
motivos marianos y la tradicional alfombra de arena y romero que cubría
el pavimento.
