miércoles, 9 de septiembre de 2015

ENTREVISTA A FRANCISCO RUEDA " PORTAVOZ DE LA PLATAFORMA PRO-CARRETERAS DEL GUADALHORCE"

Fuente.: Diario Sur.

«Nos han ninguneado y engañado tantas veces que ya no nos fiamos»

Más de 10 años de activismo ciudadano es la carta de presentación de Francisco Rueda, portavoz de la Plataforma Carreteras Guadalhorce, que pelea por la comunidad sin ninguna aspiración.

Paco Rueda -nadie le llama Francisco- es una gota de agua en el océano que demuestra cómo una sociedad, en este caso la del Valle del Guadalhorce, necesita de personas que usen su tiempo en pro de la mayoría, aunque ello signifique sacrificar la jubilación de alguien que nunca ha dejado de trabajar.

Aunque en su caso el título tenga poco sentido, él se presenta como portavoz de la Plataforma Carreteras del Guadalhorce, una organización ciudadana que él mismo fundó y cuya razón de ser era luchar por la construcción de la carretera Casapalma-Coín, una infraestructura que tras varios años de retraso parece que podría inaugurarse antes de final de año, aunque la experiencia le dice que nada está claro. «La verdad es que después de 23 años, con los cinco últimos de una lucha prácticamente constante, la experiencia que tenemos con los diferentes equipos de Fomento con los que hemos tratado en todo este tiempo no pueden ser más penosas y frustrantes, nos han decepcionado, engañado y ninguneado tantas veces, que la verdad no nos fiamos en absoluto. De todas formas alguna vez tenía que ser y pienso que esta es la definitiva», apunta.

Paco, que conoce de primera mano la política local y regional, tiene una idea bastante clara de qué ha pasado en este caso. «Lo que ha pasado con la carretera, al igual que con el resto de reivindicaciones de la comarca y otras muchas obras a lo largo y ancho de Andalucía, es el resultado de unos años de derroche, obras innecesarias y por supuesto alguna que otra hecha ex profeso con fines electorales. Al final no hubo dinero ni para las necesarias, como las nuestras, ni para las superfluas. Además, el portavoz de la plataforma añade que todo lo que vino después «es la consecuencia de la forma de actuar, por desgracia significativa, de una parte importante de nuestra clase política, cuyos miembros no dudan en tomarnos el pelo con un descaro y una desfachatez que raya en la provocación, y que a fuerza de padecerlo una y otra vez se ha convertido en algo habitual y por lo reiterativo del asunto ya nos parece de lo más natural», señala con un más que evidente enfado.

Sin embargo, y ya una vez que la carretera parece que será una realidad en breve, esta organización y el propio Paco Rueda reconocen que su labor no puede pararse ahí. «Nuestro colectivo nació en septiembre de 2010 con el objetivo general de conseguir una red de carreteras dignas para el Valle del Guadalhorce, pero el factor determinante de nuestra constitución fue la necesidad de que se terminaran las dos carreteras afectadas por la 'reprogramación' de agosto del 2010: la A-7053, en el tramo Venta de los morenos/Entrerríos, y el enlace a la A-357 entre el nudo de Venta Platero/Casapalma, consiguiendo la terminación de la primera unos meses después. Asimismo, desde el inicio de la reivindicación del Chare muchas de las personas que formamos parte de la Plataforma de Carreteras del Guadalhorce también militamos en la Plataforma Pro-Hospital del Guadalhorce, participando activamente en la misma y a la par realizando gestiones y organizando actos, tanto por nuestra parte como representando a este ultimo colectivo».

Carencias del Guadalhorce

Su labor dentro de la organización, así como su pleno conocimiento de su localidad, Coín, como del resto de municipios del Valle del Guadalhorce, hace que Paco sea capaz de hacer una fotografía crítica de cuáles son los principales problemas de la zona, hasta el punto de señalar el principal culpable sin pestañear, sabedor de que nadie puede discutírselo. «Desde hace muchos años la Junta de Andalucía tiene la zona abandonada, discriminada y olvidada, con el menor ratio de inversión por habitante de la provincia de Málaga, y me atrevería a decir de toda la comunidad autónoma. Este hecho tiene entre otras consecuencias. La falta de infraestructuras esenciales para el progreso socio-económico de la comarca, ya que su existencia sin duda la revitalizaría y sería un elemento básico para atraer empresas e impedir que se deslocalicen las pocas que ya tenemos, ya que actualmente la desinversión empresarial agravada por la crisis son el pan nuestro de cada día».

Paco Rueda conoce tanto la realidad de la comarca que no sería raro si algún día diera el salto a la política, aunque él mismo se descarta para un función que muchos vecinos le piden que realice. «Nunca me planteé entrar en ese mundo, ajeno a mi idiosincrasia, mi idea de la democracia y de lo que pienso debe ser el servicio a la comunidad. De todas formas, para mí es un honor y una satisfacción que mucha gente anónima me anime a meterme en la política, aunque por otra parte otras muchas creen que lo que hago es debido a que tengo aspiraciones políticas, incluyendo algún partido que ya daba por hecho mi inclusión en las listas de una formación rival. Por lo visto, a ciertas personas les cuesta admitir que mi trabajo y solidaridad con esta mi tierra no es más que un humilde intento de aportar un granito de arena para elevar el bienestar de los ciudadanos del Valle y de abrir un poco el camino para tratar de conseguir que de una vez por todas la ciudadanía rompa su conformismo, resignación y sumisión, perdiendo el miedo reverencial y crónico de exigir sus derechos y hablar claro a los poderosos».