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Leonor García / Málaga , salud Fuente.: Diario Málaga Hoy
El hospital del Guadalhorce -que debería haberse abierto en 2008, que se construyó a pesar de la crisis y que en un segundo plazo debería haber entrado en funcionamiento a finales de este año- está en la UCI. La Delegación de Salud no admite que carece de fondos para su apertura y sigue escudándose en que no puede recepcionar la obra porque el Ayuntamiento de Cártama no construye una subestación eléctrica que le dé suministro. Pero lo que no reconoce la Administración sanitaria, lo deja muy claro el Consistorio cartameño, del mismo signo político que la Junta de Andalucía (PSOE): el hospital del Guadalhorce no puede abrirse porque con las limitaciones presupuestarias no hay recursos.
"Mientras esté el Ayuntamiento de Cártama como culpable, Salud tiene la excusa [para no abrir el hospital]", sostiene el concejal de Vías y Obras de Cártama, Miguel Espinosa. El Consistorio ya le ha comunicado a la Delegación y lo ha mantenido varias veces en la prensa que no tiene los 2 millones de euros que cuesta la subestación y que por lo tanto no la construirá. "Dos millones para la Junta no es nada. Pero el problema no son los 2 millones, sino el coste que le supondría mantener abierto el hospital", argumentó el concejal. Espinosa precisó que el Ayuntamiento tiene un presupuesto de 13 millones y no puede detraer 2 millones para esa obra cuando este año ni siquiera podrá acometer inversiones en el pueblo debido a la contención presupuestaria.
El Consistorio firmó un convenio en el que se comprometió a hacer la subestación, pero los cálculos fijaban el coste en unos 300.000 euros. Finalmente Endesa exige unas instalaciones que cuestan 2 millones para dotar de suministro eléctrico al centro sanitario.
Espinosa dijo que el Ayuntamiento no va a buscar fórmulas para la financiación de la subestación, como en alguna ocasión sugirió la Administración sanitaria. El edil insistió en que la Junta de Andalucía no puede abrir el hospital porque carece de fondos, que las infraestructuras sanitarias no son competencia municipal y que el proyecto "está parado". Al igual que la cárcel de Archidona -construida por el Gobierno central-, el inmueble se ha convertido en un edificio fantasma en el Valle del Guadalhorce. Acabado hace casi un año y sin uso.
Mientras, Salud se aferra al mismo argumento: el Ayuntamiento de Cártama firmó un convenio en el que se comprometió a construir la subestación y tiene que hacerla. "La Junta y la Diputación ya cumplieron su parte del acuerdo", sostuvo una portavoz de la Administración sanitaria. Frente a todos los proyectos que había planteados para la provincia antes de la crisis, la Consejería de Salud mantenía hasta ahora que se terminarían aquellos que estaban en obras. Sin embargo, la realidad indica que la prioridad ahora es mantener lo que está en funcionamiento porque, por ejemplo, ni se abre el hospital del Guadalhorce ni se avanza en la ampliación del de Marbella, cuyas obras eran las más adelantadas.
Leonor García / Málaga , salud Fuente.: Diario Málaga Hoy
El hospital del Guadalhorce -que debería haberse abierto en 2008, que se construyó a pesar de la crisis y que en un segundo plazo debería haber entrado en funcionamiento a finales de este año- está en la UCI. La Delegación de Salud no admite que carece de fondos para su apertura y sigue escudándose en que no puede recepcionar la obra porque el Ayuntamiento de Cártama no construye una subestación eléctrica que le dé suministro. Pero lo que no reconoce la Administración sanitaria, lo deja muy claro el Consistorio cartameño, del mismo signo político que la Junta de Andalucía (PSOE): el hospital del Guadalhorce no puede abrirse porque con las limitaciones presupuestarias no hay recursos.
"Mientras esté el Ayuntamiento de Cártama como culpable, Salud tiene la excusa [para no abrir el hospital]", sostiene el concejal de Vías y Obras de Cártama, Miguel Espinosa. El Consistorio ya le ha comunicado a la Delegación y lo ha mantenido varias veces en la prensa que no tiene los 2 millones de euros que cuesta la subestación y que por lo tanto no la construirá. "Dos millones para la Junta no es nada. Pero el problema no son los 2 millones, sino el coste que le supondría mantener abierto el hospital", argumentó el concejal. Espinosa precisó que el Ayuntamiento tiene un presupuesto de 13 millones y no puede detraer 2 millones para esa obra cuando este año ni siquiera podrá acometer inversiones en el pueblo debido a la contención presupuestaria.
El Consistorio firmó un convenio en el que se comprometió a hacer la subestación, pero los cálculos fijaban el coste en unos 300.000 euros. Finalmente Endesa exige unas instalaciones que cuestan 2 millones para dotar de suministro eléctrico al centro sanitario.
Espinosa dijo que el Ayuntamiento no va a buscar fórmulas para la financiación de la subestación, como en alguna ocasión sugirió la Administración sanitaria. El edil insistió en que la Junta de Andalucía no puede abrir el hospital porque carece de fondos, que las infraestructuras sanitarias no son competencia municipal y que el proyecto "está parado". Al igual que la cárcel de Archidona -construida por el Gobierno central-, el inmueble se ha convertido en un edificio fantasma en el Valle del Guadalhorce. Acabado hace casi un año y sin uso.
Mientras, Salud se aferra al mismo argumento: el Ayuntamiento de Cártama firmó un convenio en el que se comprometió a construir la subestación y tiene que hacerla. "La Junta y la Diputación ya cumplieron su parte del acuerdo", sostuvo una portavoz de la Administración sanitaria. Frente a todos los proyectos que había planteados para la provincia antes de la crisis, la Consejería de Salud mantenía hasta ahora que se terminarían aquellos que estaban en obras. Sin embargo, la realidad indica que la prioridad ahora es mantener lo que está en funcionamiento porque, por ejemplo, ni se abre el hospital del Guadalhorce ni se avanza en la ampliación del de Marbella, cuyas obras eran las más adelantadas.