La Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía ha concedido la distinción de 'Zona Cardioasegurada' a 17 instituciones de Málaga y provincia tras cumplir con los requisitos en materia de formación e instalación de desfibriladores externos semiautomáticos. Una de las instituciones que ha recibido esta distinción ha sido la Ciudad Deportiva de Cártama.
El concejal de Deportes del Ayuntamiento
de Cártama, Juan Rodríguez, ha recogido esta distinción de manos del
delegado territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta
de Andalucía en Málaga, Daniel Pérez, junto a la directora del servicio
de emergencias sanitarias 061 de Málaga, María Auxiliadora Naranjo.
Con este reconocimiento, se demuestra
que los profesionales de los centros distinguidos están capacitados para
actuar de forma inmediata en caso de presenciar una parada
cardiorrespiratoria, sumando sinergias a la posterior asistencia por
parte de los equipos de emergencias sanitarias, con los objetivos de
disminuir la mortalidad y secuelas a través de una excelente actuación
inicial.
A día de hoy, Málaga cuenta con un total
de 27 instituciones reconocidas desde la puesta en marcha del programa.
La Empresa Pública de Emergencias Sanitarias es la encargada de la
gestión y registro de las organizaciones que disponen del certificado de
Zona CardioAsegurada, que constata que dichas instituciones han formado
a sus profesionales y han ubicado desfibriladores en sus instalaciones,
en el número y los lugares adecuados, según lo establecido en la Orden
de 4 de junio de 2013 (BOJA 113/2013).
Ante una situación de sospecha de parada
cardiorrespiratoria, desde los centros coordinadores de urgencias y
emergencias del 061 se anima y se explica a las personas que han dado la
alarma cómo realizar estas maniobras básicas mientras que llegan los
equipos de emergencias al lugar del suceso, dado que está demostrado que
intentar aplicar estas técnicas, a pesar de no tener conocimientos
previos en primeros auxilios, ayuda a muchos pacientes.
Los cinco minutos posteriores a una
parada cardiorrespiratoria son claves para el afectado y por ello es
fundamental que la persona que tiene el contacto inicial actúe de forma
inmediata alertando a los equipos de emergencias sanitarias y aplicando
entre tanto técnicas de reanimación básicas, como la ventilación boca a
boca y el masaje cardiaco externo.
La disponibilidad de un equipo de
desfibrilación eléctrica precoz, que puede ser utilizado por personal
ajeno a la profesión sanitaria con la realización de un curso básico de
entrenamiento, añade el recurso más eficaz para restablecer el ritmo
cardiaco viable y reducir al máximo el riesgo de muerte. La
supervivencia de muchas de las víctimas depende de que se apliquen las
técnicas básicas de reanimación cardiopulmonar en los primeros 3 o 4
minutos, lo que puede aumentar las posibilidades de supervivencia en más
del 50% de los afectados.
Las enfermedades cardiovasculares son la
primera causa de muerte en el mundo occidental y, entre ellas, ocupa un
lugar destacado la muerte súbita cardiaca que suele ocurrir, de manera
mayoritaria, fuera del entorno hospitalario. La correcta atención a la
parada cardiorrespiratoria consiste en la aplicación precoz de una serie
de acciones conocidas como cadena de supervivencia que incluye, por
este orden, el reconocimiento de la situación y activación del sistema
de emergencias sanitarias, el inicio inmediato de las maniobras de
soporte vital básico, la desfibrilación eléctrica precoz y la rápida
instauración de las técnicas de soporte vital avanzado.
Los equipos de emergencias del 061 en
Andalucía han atendido en este último año unos 1.000 casos de parada
cardiorrespiratoria, de los cuales, el 28% de los pacientes asistidos en
parada por 061 recuperan el pulso y la circulación antes de llegar al
hospital.